Corrían los años 70’ cuando la UEFA aconsejó a las distintas federaciones tener en consideración la regulación del fútbol femenino. España decidió continuar dándole la espalda, el presidente de la Real Federación Española de aquel momento, José Luis Pérez-Payá hizo diversas declaraciones como:
“ No estoy en contra del fútbol femenino, pero tampoco me agrada. No lo veo muy femenino desde el punto de vista estético. La mujer en camiseta y pantalón no está muy favorecida, cualquier traje regional le sentaría mejor.”
Declaraciones que hablan por sí solas.
Mientras tanto, fuera de nuestras fronteras, el fútbol femenino estaba comenzando a coger forma. En 1970 se celebró la primera “Copa del Mundo”, España fue candidata a albergar la tercera edición, sin embargo el silencio administrativo de la federación provocó que finalmente esto nunca llegase a ocurrir.
Dentro de todo este ambiente tan retrograda se debe destacar y agradecer a un hombre llamado: Rafael Muga, que fue una de las personas que más luchó para darle la visibilidad al fútbol femenino que merecía.
Una de las anécdotas que cuenta Rafael Muga fue cuando organizaron un partido femenino con fines benéficos, para ayudar a las personas con Síndrome de Down y justo antes de comenzar el encuentro, en el palco de autoridades reprodujo una gran disputa entre los que estaban a favor de que se disputase ese partido y los que pretendían que no se jugase y entre el grupo de los que no querían que se jugase apareció un hombre que aseguraba tener buenos contactos que amenazaba diciendo que si el balón echaba a rodar llamaría a Carmen Polo, mujer de Francisco Franco, finalmente le hicieron ver que era por una buena causa y quedó en nada.
Rafael Muga fue quien dio forma a esta primera selección. Comenzó ayudándose de 2 referentes como fueron: Angel Castillo y Javier Jiménez. Estos fueron los que estuvieron en los banquillos en el estreno de la selección el 21 de febrero de 1971 en “La Condomina” Murcia. Esta selección estaba formada por jugadoras de distintos clubes entre los que estaban “El Sizam de Madrid” y “Racing de Valencia” aquel 11 para la historia fue formado por: Kubalita, Virginia II, García, Herrero, Feijoo, Angelines, Vázquez, Virginia I, Cruz, Conchi y Laura.
Gran parte de estas jugadoras tenían menos de 14 años, lo que supuso problemas a la hora de visitar otros países.
La noche previa a la primera salida al extranjero tuvieron que soportar condiciones inhumanas, tuvieron que hacer noche en un piso vacío de Valencia, todas juntas durmiendo apelotonadas en el suelo, pero la ilusión por jugar al fútbol representando al combinado nacional, para ellas estaba muy por encima de todas estas situaciones.
Foto enviada por la jugadora
En esta primera época algunas jugadoras del combinado nacional hacían declaraciones tales como las siguientes:
“Muchas veces preferíamos que nuestras familias o amigos no viniesen a vernos jugar porque se podían sentir incomodos entre tantos insultos y podían verse envueltos en trifulcas en las que no merecía la pena entrar”
La portera de aquella selección “Kubalita” citó textualmente para una entrevista concedida recientemente
No conocía el término “Selección Clandestina”, no lo comparto porque no nos escondíamos e íbamos con la cara y el corazón por delante. De la Federación, puedo decir que hicieron todo lo posible para que el fútbol femenino desapareciera del mapa. En el documental de Carlos Troncoso: «Algo más que una pasión» (Filmin), habla el presidente de la RFEF de la época Jose Luis Pérez-Paya y deja muy claros sus valores y el porque de su rechazo.
En los primeros partidos, las jugadoras españolas no pudieron lucir el escudo en sus camisetas por desautorización federativa. Se jugaban dos tiempos de 35 minutos. El precio de las entradas era de 50 pesetas en la grada de preferencia y 40 pesetas para el resto de localidades.
En 1971, se celebró en México un Mundial femenino oficioso, ya que no estuvo organizado por la FIFA. España fue invitada a participar, pero tuvo que desistir por la prohibición de una Federación Española de Fútbol que hasta 1983 no fue capaz de reconocer de forma oficial al fútbol femenino.
Rafael Muga organizó el 8 de diciembre de 1970 en el madrileño barrio de Villaverde el primer partido de fútbol femenino en España, entre el Sizam y el Mercacredit, siendo presidente de este último equipo. También fue el primero que formó una Selección Española que, aun no estando reconocida por la Federación Española de Fútbol, defendió el escudo y la bandera de España ante equipos de Italia, Francia y Brasil, entre otros.
Foto via: Diario La Verdad
A continuación vamos a dejarles una crónica copiada textualmente incluyendo las faltas de ortografía de un partido de la selección:
Cronica partido: «Anteayer, en el campo del ‘Español’, jugóse el primer partido de futbol entre representantes del sexo débil, que en dicho día se parangonaron con el fuerte. Este partido, cuyos beneficios se destinaban a favor de la Federación Femenina contra la Tuberculosis, era, por su naturaleza, esperado con cierta espectación, siendo presenciado por un público regular y por el capitán general de la región, que acudió con su bella hija Carmen. Las jugadoras estuvieron a la altura que les correspondía, notándose en el comienzo del encuentro bastante azaramiento, que fué desapareciendo hacia el final, en el que el bando ‘Giralda’, que lucía jersey rojo, consiguió apuntarse dos goals por uno que en la primera mitad entró el ‘Montserrat’, que lo ostentaba blanco. Esta primera actuación de la mujer en el viril fútbol, no nos satisfizo, no sólo por su poco aspecto sportivo, sino que también porque a las descendientes de la madre Eva les obliga a adoptar tan poco adecuadas como inestéticas posiciones, que eliminan la gracia femenil».
Articulo Publicado en Grada3
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